Perú pierde 300 millones de dólares por pesca ilegal de flotas chinas
Foto: Picryl.
La Sociedad Nacional de Pesca Artesanal del Perú (SONAPESCAL) ha alertado sobre la significativa caída en las exportaciones de calamar, lo que ha ocasionado una pérdida de US$300 millones para el país.
Esta situación se atribuye principalmente a la pesca ilegal realizada por flotas chinas que han operado sin autorización en el litoral peruano. Según el Ministerio de la Producción (Produce), las capturas de calamar en el primer semestre de 2024 fueron de solo 140.000 toneladas, lo que representa una disminución del 70% en comparación con el mismo período del año anterior. Esta caída ha tenido un impacto negativo en el empleo formal del sector pesquero.
Henry Juárez, representante de la Asociación de Pescadores Artesanales, calificó el 2024 como «el peor año para la industria pesquera de consumo humano directo en lo que va de este siglo».
Juárez destacó que las actividades de las embarcaciones chinas no solo se limitan a pescar en áreas permitidas, sino que también han ingresado repetidamente en aguas jurisdiccionales del Perú sin autorización, una práctica que se ha intensificado a medida que la flota pesquera china se expande.
SONAPESCAL ha señalado que estas infracciones se han producido durante años, con barcos chinos apagando sus equipos satelitales para evadir las regulaciones peruanas y pescar ilegalmente. Esta conducta no solo amenaza los ecosistemas marinos, sino que también afecta la economía local, ya que muchos pescadores artesanales dependen de la captura de calamar para su sustento diario.
En 2020, el gobierno peruano emitió un decreto supremo que requería que todas las embarcaciones extranjeras usaran un dispositivo satelital para monitorear sus actividades y disuadir comportamientos irregulares. Sin embargo, desde mayo de 2023, las autoridades peruanas han flexibilizado estas restricciones, permitiendo a las flotas chinas operar sin el dispositivo de rastreo, lo que ha facilitado la entrada de estos barcos al mar peruano sin cumplir con las normativas locales. A pesar de las multas mínimas impuestas, las acciones ilegales han continuado, y China ha reducido considerablemente sus costos de operación.
El ministro de Producción, Sergio González, anunció en julio que se publicaría una nueva norma para reforzar el control sobre las flotas chinas, pero hasta ahora no se ha implementado. Durante agosto, al menos nueve barcos con antecedentes de manipulación de sus dispositivos de posicionamiento y abusos laborales han ingresado ilegalmente a las aguas peruanas, principalmente en el puerto del Callao.
Juárez señaló que desde marzo, China ha intensificado sus actividades pesqueras en la frontera marítima de las 200 millas peruanas, incrementando la incidencia de pesca ilegal.
Aunque se han tomado medidas para evitar estas prácticas, las embarcaciones chinas continúan pescando cerca de la frontera, aparentemente con la intención de explotar recursos dentro de las aguas peruanas. Estas acciones no solo violan acuerdos marítimos internacionales, sino que también amenazan la sostenibilidad de los recursos pesqueros en la región.
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