El Gobierno venezolano instauró siete Zonas Económicas Especiales (ZEE) en su territorio como estrategia para ampliar sus prácticas de libre mercado, demarcando zonas geográficas que atrajeran la inversión extranjera y nacional. La creación de estas ZEE se enmarca en un contexto caracterizado por la baja de los precios del petróleo y el endeudamiento con China, de ahí que se adoptaran estos modelos en aras de brindar amplios beneficios para el país asiático.